La resiliencia

La resiliencia

¿Cómo es nuestra capacidad de adaptarnos a los cambios y aprender de ellos?

En esta publicación voy a hablar del término RESILIENCIA. 

La resiliencia es la capacidad para adaptarse a los momentos de adversidad de la vida, de situaciones dolorosas que nos ponen a prueba. Los fracasos, pérdidas, problemas económicos, rupturas, enfermedades y aprender de ellos.  Estos son momentos que nos pueden llevar a una inestabilidad emocional díficil de manejar, momentos en los cuales dudamos de si podemos ser capaces de superar estas situaciones.

La resiliencia nos habla de la capacidad del ser humano de convertir estos momentos de sufrimiento y oportunidades de aprendizaje y fortaleza de nuestra propia persona. En estas circunstancias descritas en las que ya sintamos que no tenemos nada más que perder, siempre podremos tener en nuestro poder nuestra actitud de levantarnos y comenzar de nuevo.

Por lo tanto, este término  nos habla de la habilidad de soportar situaciones límite, de la flexibilidad de readaptarnos y transformar esas situaciones en desafíos de los que salir aún más reforzados que antes. Por todo ello, es una de las claves del éxito. Aunque algunas personas tengan esta capacidad de forma innata, la resiliencia habitualmente no es algo con lo que nacemos. Por suerte, esta habilidad se puede desarrollar y en ello toma gran medida la educación que recibimos.

Por ejemplo, la sobreprotección es contraproducente para el crecimiento de la resiliencia. Esta tiene como consecuencia generar una fragilidad emocional en la que se ve mermada la capacidad de superar la adversidad y los retos a los que nos enfrenta la vida.

Características de las personas resilientes

  • Flexibilidad ante los cambios: a lo largo de la vida, los cambios son necesarios e inevitables. Sin embargo, no todas las personas están de igual manera preparados para ellos. Las personas resilientes están dotados de una flexibilidad significativa para adaptarse a estos sin miedo. Estas, ven los cambios como oportunidades para crecer en vez de amenazas. Si estamos aferrados a una vida sin cambios, esto nos generará más miedo e inseguridad tanto en la vida como en nosotros mismos. Cuanto más controlados queremos tener lo que pasa a nuestro alrededor, mayor será la tensión que sintamos.
  • Relativiza: en demasiadas ocasiones magnificamos nuestra reacción ante los acontecimientos que suceden. Si fueramos capaces de vez en cuando de preguntarnos si realmente es normal que reaccionemos así, podríamos trabajar con ello estas preocupaciones y obsesiones y con ello lograríamos ser más resilientes. Si no somos capaces de tomar distancia de los problemas, nos desbordaremos. Convertirse en observador de lo que está sucediendo nos ayudará a relativizar.
  • Aceptación: aceptar que las cosas no siempre serán como queremos también es clave para aumentar nuestra resiliencia. Las cosas son como son, no como queremos ni como deberían de ser. No podemos modificar las circunstancias pero sí tenemos la capacidad de ser flexibles en cómo actuamos y pensamos en relación a ello.
  • Autoestima: la autoestima está muy relacionada a lo que hemos vivido desde el nacimiento y lo que hemos aprendido de nuestras figuras de apego y seres cercanos. No podemos cambiar lo que nos ha sucedido pero sí podemos fortalecer nuestra autoestima mediante diversas técnicas y sobretodo, mediante el amor propio. Las personas resilientes confían en sí mismas, sin perder mucho tiempo en lamentos. Fortaleciendo la autoestima, disminuye el miedo a las críticas. Estas personas se centran en sus objetivos persiguiéndolos y pidiendo ayuda en caso de necesitarlo.
  • Conversión de problemas en lecciones: una persona resiliente tiene la capacidad de ver de los problemas oportunidades o lecciones. Las crisis van y vienen, y pueden aportarnos oportunidades de aprendizaje y cambios. Esto les hace además perseverantes.

Y tú, ¿Te consideras una persona resiliente?, ¿qué importancia le das?, ¿haces algo específico para trabajarla?,  ¿Te gustaría saber cómo poder hacer crecer tu resiliencia?. Te leo.

Si estás pensando en acudir a terapia, mi consulta se encuentra en el centro de Madrid. Ponte en contacto conmigo mediante el cuestionario de «Contacto». Estaré encantada de resolver tus dudas.

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